Un breve post para contarles que por ahora tardaré el doble en escribir y básicamente, en todo...
Ayer, mientras subía las escaleras para traer a Eduardo su "moayita" (almohadita), me caí y traté de meter las manos. No resultó del todo bien pues enseguida tenía mucho dolor en la pierna derecha; pero lo que realmente me estaba doblando de dolor era mi dedo meñique de la mano. Rápidamente se fue poniendo de todos colores hasta llegar a un morado súper intenso y obviamente ose triplicó (por lo menos) su anchura.
Después de un rato en el hospital y dos radiografías, el ortopedista diagnosticó que no había fractura (si hubiera sido evaluado por el dolor, les juro que sí era fractura) sino un esguince; me inmobilizó la mano DERECHA por dos semanas, pero aquí estamos...
Mis mejores experpiencias de todo esto hasta ahora:
- Mientras lloraba en lo que llegaban a ayudarme, Lalito me daba besitos en mis dedos.
- Lalito haciendo amigos en el hospital en lo que el doctor curaba "titis de mamita"
- Que hoy en la mañana Eduardo no quisiera que yo lo sacara de la cuna porque "tú no puedes mami, no cargas"...