Me ha costado mucho tiempo y trabajo escribir este post, tal vez porque no quería reconocer que estoy muy lejos de ser perfecta.
Y es que de pronto me convertí en profesionista, esposa y ama de casa. Cuando apenas estaba aprendiendo como hacer todo esto llegó a mi vida una hermosa bendición, y no venía sola pues como dicen por ahí mi bebé traía torta bajo el brazo... Fue entonces que combiné lo que ya hacía, con un bello embarazo y el inicio de mis estudios de maestría.